La vida nos presenta retos constantes, momentos de cambio y situaciones que a veces nos descolocan emocionalmente. En esos instantes, buscamos herramientas para entendernos mejor y recuperar el equilibrio. Aquí es donde la Terapia Gestalt ofrece una propuesta diferente, cercana y profundamente transformadora.
Más que un método terapéutico, la Terapia Gestalt es una filosofía de vida que invita a vivir el presente, el aquí y ahora. Desarrollada en los años 50 por Fritz Perls, parte de la idea de que somos seres completos donde cuerpo, mente y emociones están conectados. «La conciencia en el presente es el primer paso hacia el cambio«, decía Perls, resaltando la importancia de estar atentos y atentas a lo que sentimos en el momento.
Recuerdo perfectamente cómo me sentía antes de empezar mi proceso terapéutico. Me despertaba con una sensación de vacío y confusión que no sabía cómo explicar. Había días en los que me sentía desconectada de mí misma, como si estuviera funcionando en piloto automático. Sabía que algo no estaba bien, pero no podía ponerle nombre.
Fue entonces cuando decidí buscar ayuda. Entré en terapia con la sensación de estar rota, pero también con la esperanza de encontrar respuestas. La primera sesión fue extraña y, a la vez, reveladora. Por primera vez, alguien me escuchaba sin juzgarme. Me preguntaron: «¿Cómo te sientes en este momento?«. Recuerdo haberme quedado en silencio, porque ni siquiera lo sabía.
Con el tiempo, empecé a notar cambios profundos en mi interior. A través de las sesiones, aprendí no solo a identificar las emociones que había estado reprimiendo durante años, sino también a comprenderlas, aceptarlas y darles el espacio que realmente necesitaban. Fue un proceso de autodescubrimiento y sanación que me permitió reconectar conmigo misma y vivir con mayor autenticidad y bienestar.
Cada sesión es un espacio seguro, libre de juicios, diseñado para que te conozcas mejor y encuentres nuevas formas de gestionar lo que te preocupa. No se trata solo de hablar, sino de conectar con lo que sientes en el presente y explorar lo que tu cuerpo y tus emociones te están diciendo.
La terapia no consiste en recibir consejos, sino en redescubrir, a través de la escucha y el acompañamiento, tus propias respuestas. Puede que comencemos con una simple pregunta: «¿Cómo te sientes hoy?» o «¿Dónde notas esa emoción en tu cuerpo?«. Desde ahí, trabajaremos con herramientas vivenciales y creativas como la técnica de la silla vacía, ejercicios corporales o dinámicas con dibujo y movimiento. Todo se adapta a lo que necesitas en ese momento, sin guiones rígidos.
En el trabajo grupal, compartir experiencias y emociones nos ayuda a vernos reflejadas en los demás. A través de dinámicas creativas, dramatizaciones o juegos simbólicos, exploramos temas como la confianza, los límites personales y la expresión emocional. El grupo se convierte en un espacio de apoyo mutuo, donde el sentido de pertenencia fortalece el proceso de cada persona.
🧠 Mayor autoconciencia: Aprendes a reconocer lo que sientes y cómo influye en tu vida. Te das el permiso de escucharte y comprenderte mejor. Como decía Perls, «No soy en el mundo, soy el mundo».
💖 Liberación emocional y reducción del estrés: Expresar lo que llevas dentro te ayuda a aliviar la ansiedad y soltar la carga emocional, permitiéndote vivir con más ligereza y equilibrio.
🗣️ Relaciones más sanas: Mejoras la comunicación contigo y con quienes te rodean, fortaleciendo los vínculos desde la empatía y el respeto.
💪 Empoderamiento personal: Descubres tu capacidad para tomar decisiones con confianza, dejando atrás el miedo a equivocarte y conectando con lo que realmente necesitas.
🎨 Autoaceptación y creatividad: Te permites ser quien eres, sin exigencias ni juicios. Aprendes a valorar tus fortalezas y a explorar nuevas formas de afrontar los desafíos con mayor flexibilidad y creatividad.
🌟 Mayor conexión con el presente: La Terapia Gestalt te invita a vivir el aquí y ahora, ayudándote a soltar lo que pesa del pasado y a reducir la ansiedad por el futuro.
✨ Un camino hacia tu bienestar: No se trata de ser «perfecto» o de eliminar dificultades, sino de encontrar nuevas maneras de vivir con autenticidad, disfrutando más de ti y de la vida.
🔹 Aprender a sostenerte en ti mismo: La terapia te ayuda a pasar de buscar apoyo en el otro a confiar en tu propia capacidad de sostén. Aprendes a mirarte con mayor seguridad y a encontrar en ti mismo o en ti misma la validación y el equilibrio que antes buscabas afuera.
Porque todo lo que necesitas para transformarte ya está en ti… solo necesitas descubrirlo. 💛😊
Para que este proceso funcione, es fundamental construir una relación de confianza mutua. Este vínculo es la base del trabajo terapéutico, un espacio donde puedas sentirte acompañada o acompañado sin, con la libertad de explorar lo que sientes en un ambiente seguro. La conexión que establezcamos será clave para que el proceso tenga sentido y te ayude a descubrir nuevas formas de entenderte y cuidarte.
El objetivo no es eliminar los problemas, sino encontrar nuevas maneras de vivir con más claridad y libertad. Estoy aquí para acompañarte en ese camino, brindándote un espacio donde puedas sentirte a gusto, explorar lo que necesitas y avanzar a tu propio ritmo. 💙
La Terapia es para cualquier persona que desee entenderse mejor y crecer emocionalmente. Ya sea que estés atravesando un cambio importante, una pérdida o simplemente quieras aprender a gestionar tus emociones, este enfoque puede ser un gran aliado.
Fritz Perls decía: «No empujes el río, fluye solo«. La Terapia Gestalt no pretende cambiarte, sino ayudarte a fluir, reconectando contigo misma y permitiéndote ser más auténtico.
Explorar la Terapia es abrir la puerta a un proceso de transformación personal. Es un viaje hacia el autoconocimiento, donde cada paso cuenta y cada descubrimiento te acerca más a tu bienestar. Confía en el proceso, porque en él está la clave para crecer.
Cada emoción que reconoces y aceptas es un paso hacia tu libertad interior.
¡Permítete sentir y descubrir todo lo que ya vive en ti!
